26 de septiembre de 2010

Goodbye Norma Jean

Goodbye Norma Jean
Though I never knew you at all
You had the grace to hold yourself
While those around you crawled
They crawled out of the woodwork
And they whispered into your brain
They set you on the treadmill
And they made you change your name

And it seems to me you lived your life

Like a candle in the wind
Never knowing who to cling to
When the rain set in
And I would have liked to have known you
But I was just a kid
Your candle burned out long before
Your legend ever did

Loneliness was tough

The toughest role you ever played
Hollywood created a superstar
And pain was the price you paid
Even when you died
Oh the press still hounded you
All the papers had to say
Was that Marilyn was found in the nude

Goodbye Norma Jean

From the young man in the 22nd row
Who sees you as something as more than sexual
More than just our Marilyn Monroe
Candle in the wind - Elthon John

21 de septiembre de 2010

Primavera

Recuerdo una época cuando los días de la primavera eran toda una revolución. Cuando se generaban discusiones en torno a eso, cuando uno lo esperaba con ansias. Recuerdo haberme rateado al día siguiente del colegio, sólo por la inmensa emoción que aun me embriagaba de uno de los mejores días del estudiante- aunque ahora al intentar evocar que día fue, se haga una gran nebulosa en mi mente y no logre descifrarlo-.

 
Debí imaginarme que este no iba a ser uno de esos años, la facultad, los novios, el trabajo, los compromisos, fueron arrebatando a cada uno de los usuales integrantes de estos días. En realidad la primera advertencia fue la falta de discusión. Como sí de una señal premeditoria se tratase, no hubo peleas, no hubo diversidad de opiniones, y por primera vez en tantos años todas estuvimos de acuerdo a la primera opción. Debí vislumbrar el significado de tan poco interés, debí darme cuenta que había un trasfondo.

 
Llegó el día y uno no puede evitar pensar, que los años estan haciendo mella en nuestra amistad, o por lo menos en algunas.

 
Pero bueno, siempre nos queda el consuelo de saber que la primavera llega para todos, que el amor se fortalece, que las flores florecen, y que a Galliano le sienta muy bien el sol de esta estación. O al menos ... Eso es lo que dicen


17 de septiembre de 2010

Paseando por el tiempo

Sí el objetivo de Marc Jacobs era diseñar una colección usable, fuerte en colores y rica en texturas. Sin duda lo ha logrado. Llamativa al extremo, muy de verano- bajo una sombrilla, a la orilla de una pileta, en noches calidas- y muy "ventana al pasado". Me es imposible no imaginar ciertas películas de épocas mediante los disparadores que resultan ser las imágenes. 

Me gustan los colores fuertes para la primavera, me gustan los colores cálidos para el verano, me gusta que la gente al pasar voltee a ver, me gusta la ropa que no deja a nadie indiferente. No por eso me gustan la gente que va de payasos por la vida, pero sí aquellos que muestran saber lo que hacen, reflejandolo en lo que se ponen.

3 de septiembre de 2010

Cantando bajo la lluvia


Tengo sentimientos bipolares respecto a la lluvia. Por un lado, y relacionado a una faceta más mundana, logra irritarme terriblemente. Hay que ir esquivando charcos, evitando paraguas o gente completamente empapada, el pelo termina siendo siempre un desastre. Sin hablar que sí te olvidaste el paragua, tenés grandes posibilidades de terminar un par de días en cama, gracias a ese simple descuido.
Me molesta la lluvia, porque creo fervientemente que saca lo peor de la gente, la altera. Como si por ir corriendo, o llevándose a la gente por delante fuesen a mojarse menos.  Como sí esos tres segundos que se ahorran hicieran la diferencia. Hasta los automovilistas parecen estar desesperados por llegar a sus objetivos, y se niegan a dejar pasar peatones, o no miran por donde pasan bañando totalmente a algún desafortunado. 
Pero cuando creo que mi día no puede empezar peor, recuerdo aquellas razones por las que me gusta la lluvia. Siempre me recuerda a él, al día que nos conocimos, al día que nos reencontramos, al día que nos abandonamos mutuamente –una de las mejores decisiones que tome – y una sonrisa nostálgica se me instala en la cara.
Instantáneamente recuerdo el tema de Frank Sinatra, y empiezo a tararearlo bajito como para darme buen ánimo. Recuerdo un piloto verde esmeralda que adquirí hace un par de temporadas y en los días nublados, logra hacer que todo brille un poquito más. Recuerdo que el final de Desayuno en Tiffanys es bajo la lluvia.
Y que en este tipo de días, todo puede parecer más especial, por el sólo hecho de tener un final de película.

1 de septiembre de 2010

Amores Fugaces



Generalmente el viaje de aproximadamente 50 minutos de la facultad a mi casa lo hago leyendo, algunos de los tantos apuntes que SIEMPRE tengo que leer. Ya se volvió tan rutinario, que he aprendido a hacerlo en cualquier circunstancia, eso incluye trenes, colectivos, horas pico, etc. Pero hoy, cansada mentalmente del teórico de 4 hs, me dispuse a mirar un punto fijo con cara perdida.

Tres estaciones antes de llegar, se desocupo un asiento y pude sentarme, para así seguir mirando la nada un poco más cerca de la ventana. Sin intención de que ese fuera un viaje aunque sea, mínimamente, fuera de lo común.  Pero no pudo ser.

Los amores a primera vista siempre me parecieron más poeticos que reales. Pero hay veces, hay ocasiones en la que nos toman desprevenidos y alguien nos deslumbra. Por falta de agallas, valentía o cara dures quedan ahí, no trascienden y pasan a quedar archivados como esos amores fugaces que duran unos 10 minutos de miradas encontradas, sonrisas cómplices y despedidas sin palabras.

Así fue, nos miramos y enseguida nos llamamos la atención. De alguna manera muy ridícula, recordé la canción de Jambes Blunt, “You’re beautiful”.

“She smiled at me on the subway.
She was with another man.”

Ridiculo, no? Pero fue así. Bajamos en la misma estación y cambio su recorrido a último instante, para colocarse detrás de mí, en la fila del molinete, descendimos las escaleras prácticamente a la par. Y antes de que el paso nivel nos separe en dos caminos distintos, nos miramos una última vez, para continuar con nuestras vidas.

Mitad por cobardía, mitad por sentido común ninguno se atrevió a decir nada. Quizás se trate de eso que decía  El Retrato de Dorian Gray que la segunda era la marca registrada de la primera. Quién sabe. Pero son cosas que pasan, son momentos muy particulares que nos hacen estallar de adrenalina y sentirnos un poco especial en un día más de nuestra rutina.

Jamás lo voy a volver, ni a él, ni a muchos otros que me han encandilado. Así es la vida, llena de momentos precisos que te llaman la atención fuera de lógica o razón

Como diría Sabina: “Amores eternos que duran, lo que dura un corto invierno”.